Las estructuras de las religiones
Los seres humanos hemos edificado unas estructuras ante las religiones y estas son muchas y nos sirven como muletas para andar por la vida; esto es por no reconocer la presencia de Dios que se halla en todas las cosas. “El hombre tiene por lo común bastante religión para aborrecerse, una y muy raras veces la necesaria para amarse los unos a los otros”. (Dr. Swift) ¿Por qué motivo se han creado estas estructuras en las religiones? Desde el momento que hemos hecho las estructuras el negocio se ha puesto en marcha; grandes edificios dicen que son la casa de Dios, pero este tiene todo lo creado, todo el universo, todo el cosmos, y continúa creando galaxias, mundos y soles que nosotros no vemos…
Pero las personas tenemos un concepto muy pobre de la magnificencia de Dios y hemos querido adornar al poder de Dios con ORO y con grandes edificios y decimos: esto es la casa del SEÑOR, pero como este no es material no necesita cobijarse en ninguna morada; toda la bóveda celeste le pertenece, con sus luminarias estrellas, Soles y cometas.
Las religiones son el conjunto de creencias o dogmas acerca de la divinidad, de sentimientos morales, de veneración y temor hacia ella; para algunas personas la religión es una necesidad o sea estar atados a los dogmas que estas religiones nos han impuesto; todas las religiones tienen un fin, controlar al género humano, esto no quiere decir que la labor de ciertos religiosos han hecho y están haciendo en la humanidad; como en todas las cosas tropezamos con personas que están con gran voluntad, que se sacrifican y ayudan a una parte de las personas, de todo hay en la viña del Señor…
Con este documento solamente quiero constatar que sin estructuras ni lujos superfluos las religiones podrían funcionar, si el corazón de sus creyentes fuese límpido y no se aprovechasen de las estructuras doradas, de esos lujos innecesarios que son un negocio en muchas ocasiones descarado y poco ético. “Nada hay más antiguo que Dios, porque no ha sido creado; nada más hermoso que el mundo, porque es la obra de Dios; nada más activo que el pensamiento, porque se extiende en todo el Universo; nada más fuerte que la necesidad, porque todo le está sometido; nada más sabio que el tiempo, porque a él debemos todos los descubrimientos”. (Thales) Tenemos que tener en cuenta que las religiones y sus estructuras nada tienen que ver con la espiritualidad que podamos tener las personas, una parte de aquellos seres que son espirituales no están sujetos a las doctrinas ni reglas dogmáticas, estas personas siguen las leyes de la Madre Naturaleza que no está estructurada por los hombres sino por las leyes cósmicas que desconocemos; por ejemplo, hay templos construidos cuyas medidas son áureas.
“Así pues, la espiritualidad no es la aspiración devota; es la clase de intelecto más elevada, la que conoce las funciones de la Naturaleza por la asimilación directa de la mente y el corazón, y sus principios superiores”. (A. P. Sinett, B. E, p, 144.)
Los montajes y estructuras de las religiones, todas ellas se han convertido en un gran negocio, y han perdido su origen primigenio; bien sean los Profetas o Avataras, filósofos o personas sencillas que han dejado un legado de sabiduría, nunca han fabricado ninguna estructura, pues las estructuras encierran a las personas privándolas de la libertad; yo considero que todo hombre debe de tener libertad para hacer lo que quiera siempre y cuando no infrinja la libertad igual de cualquier otra persona…
Cuando las personas seamos respetuosas con todas las creencias y religiones, empezaremos a practicar la libertad y dejaremos que cada persona exprese su creencia y no se le imponga ningún dogma. “La condición de la libertad, es ser de muchos deseada y en pocos bien empleada. El divino Platón decía muchas veces a los atenienses: Mirad, atenienses, por vosotros, no perdáis por viciosos lo que ganasteis por esforzados; porque os hago saber que la libertad, no menos necesidad tiene de cordura para conservarse, de esfuerzo para ganarse”. (Fray Antonio de Guevara)
No olvidemos que no existe religión más grande que la verdad, con ella podemos caminar por todas partes y con la cabeza bien alta…
23.5.18. J.T.D.
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